lunes, 7 de diciembre de 2020

BORBONEANDO

HAY mucha gente que trata de justificar la regularización que pretender hacer el Rey emérito Juan Carlos I diciendo que es como cualquier ciudadano que se pone al corriente con Hacienda. No puede ser lo mismo, el Rey cobra del dinero público que sale de los impuestos de todos los españoles y además, se pone al corriente una vez descubierto. 

SE considera la regularización tributaria cuando se haya procedido por el tributario al completo reconocimiento y pago de la deuda tributaria antes de que por la Administración tributaria se le haya notificado el inicio de  actuaciones de comprobación o investigación tendentes... (Articulo 305 apartado 4 del código penal)

EN cuanto a los turcos de Jaffa es verdad que hice fusilar a dos mil. No podía llevar los prisioneros conmigo pues carecía de pan y eran unos diablos peligrosos para soltarlos en el desierto. Napoleón (Stendhal). Otro patriota que tampoco quiso hacer prisioneros.

ANTES que monárquicos muchos voceros eran Juan Carlistas. Ahora que Juan Carlos salió rana dicen que no hay que mezclar la Institución con la persona. Desde el primer Borbón, Felipe V, hasta hoy, no se libra ninguno de la corrupción.

La esposa de Fernando VII y madre de Isabel II, María Cristina de Borbón-Dos Sicilias, junto con su marido Fernando Muñoz, participó en todas las grandes obras públicas de la época: ferrocarriles, canales, puertos etc. Con José de Salamanca y Mayol, Marqués de Salamanca y Ministro de Hacienda, dieron un pelotazo bursátiles en 1846. El barrio de Salamanca en Madrid debe su nombre a Mayol.

EN la serie Gambito de dama, cuando la niña protagonista le pregunta al bedel del orfanato, donde estaba internada, si puede jugar con él, éste, que está jugando al ajedrez consigo mismo, le responde: no juego con desconocidos. 

A Pablo desde pequeño los únicos juguetes que le interesaron son los que participa o se enfrenta con otros. Los juguetes individuales ni los mira. El parchís, las damas, el ajedrez, el monopoly. Ayer me llamó para preguntarme si sabía jugar al tute. Así que una de dos o hago como el bedel del orfanato o le pido un güelu a los Reyes. Este año por lo menos uno vienen de Oriente por Navidad.  

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