MILENA

"Amo la vida, la vida en su totalidad, la mágica, maravillosa y resplandeciente vida en todas sus manifestaciones, en todas sus formas, en sus actividades cotidianas y en sus fiestas, en la superficie y en lo más hondo..."
"Seres Humanos inquietos"
Milena Jesenská

Margarete Buber-Neumann conoció a Milena Jesenská en el campo de concentración de Ravensbrük. Poco antes de morir Milena le había dicho a Margarete: "Sé que al menos tú no me olvidarás, que podré seguir viviendo en ti. Tú les dices a los demás quién fui, serás mi juez clemente...". Estas palabras son las que hicieron que Margarete Buber escribiera este conmovedor libro sobre Milena, una mujer que se volcó en ayuda de los demás con una arrolladora personalidad. El primer día después de la ocupación alemana los miembros de la redacción de Prítomnost se reunían para ver que decisiones tomar, deprimidos por la situación todos hacían pronósticos tenebrosos, cuando apareció Milena a un redactor se el escapó "¡Gracias a Dios! ¡Por fin un hombre!". Milena tenia el donde de la empatía y según ella decía de si misma era "una madeja de sentimientos". Milena se casó dos veces y mantuvo con Kafka una relación amorosa que durante mucho tiempo fue solo epistolar y que terminó por deseo del escritor. Milena decía que Kafka no tenia la facultad de vivir.  En cartas a Milena Kafka le alababa la naturalidad con la que de ella surgía, siempre, lo más necesario. El libro es también el relato de una época.