lunes, 11 de septiembre de 2017

APEGOS FEROCES

Nuestros mejores momentos juntas son cuando hablamos del pasado. Lo único que odia mama  es el presente en cuanto el presente se hace pasado, comienza a amarlo inmediatamente.
Vivian Gornick

No se puedo haber escogido mejor título para unas memorias como estas. Vivian y su madre se odian y se aman a la vez. Son iguales de carácter. En sus paseos por Manhattan se dedican al neoyorquino juego del análisis mutuo. En este libro Vivian reconstruye con su madre la infancia en un bloque de familias judías del Bronx, y, en especial, la relación entre ellas y Netti. Las dos se quedaron viudas siendo jóvenes pero mientras Netti cogió el camino del sexo la madre de Vivian tomó el del lamento. La vida parecía más plena, más intensa y más interesante cuando mi madre daba sentido a la actividad humana que transcurría en el callejón. Sabía convertir el cotilleo en información. En las memorias, Vivian va tejiendo la historia de su vida. Tuve la curiosidad de anotar las veces que la escritora cita los ojos. Ella los tiene muy guapos. "ojos como platos" "pude leer en sus ojos " "sus ojos bailaban con interes""ojos azules y ensoñadores""ojos azules fríos e indescifrables""ojos de loco""ojos azul glacial" "apagados ojos marrones" "puede ver la cólera en sus ojos" "ojos opacos" "ojos de terrible ansiedad" "ojos almendrados" "ojos vidriosos" le quedaron los ojos en blanco" "yo no se que soy a sus ojos"

No hay comentarios:

Publicar un comentario