UN CERO A LA IZQUIERDA MUY VALIOSO

LA infanta Cristina fue un cero a la izquierda muy valioso. Como vocal del Instituto Noos, sin ánimo de lucro, su DNI fue 00000014Z fue un agujero negro para hacienda. 

EL Rey Juan Carlos I también utilizó como pantalla la corona. Le prestó ante notario a la Infanta 1,2 millones de euros a devolver en veintitrés años sin intereses. Esto es lo más parecido a una donación Real. Disparando con pólvora del Rey. En el momento del juicio la Infanta solo había devuelto 150.000 euros a pesar que después de los tres años de carencia se establecían una serie de cuotas.

SE nota que en esta Navidad estuve enfrascado en el libro de Pilar Urbano "La pieza 25" Operación salvar a la Infanta.Debemos de condenar y condenamos a Doña CRISTINA FEDERICA DE BORBÓN Y GRECIA , en calidad de responsabilidad civil a título lucrativo, responderá, conjunta y solidariamente con D. Ignacio Urdangarin, respecto de la responsabilidad civil de éste último, hasta la cuantía de 265.088,42 euros. 

CONTABA  Miguel Torga en su libro de memorias, "La creación del mundo", que en su consulta tenía que consolar a pacientes con enfermedades graves cuando él se estaba muriendo y no tenía consuelo para sí mismo. Adolfo Correira da Rocha, auténtico nombre de Miguel Torga, era médico. Ayer estuvimos con A. y nos contó la forma tan despiadada con que una médica le contó, delante de su hermana M., que está última tenía un cáncer de pulmón con muy mal pronóstico.

YO, qué soy muy ingenuo, creo que lo verdaderamente patriótico es pagar impuestos porque las banderitas se las lleva el viento.

NICOLAU María Rubio y Tudurí en 1937 intentó negociar en Londres, por encargo de la Generalitat, la independencia de Cataluña para evitar que cayera en manos de Franco. PARA TENER CASA HAY QUE GANAR LA GUERRA. Joan Margarit.

EL mosaico de Alejandro es el más antiguo y complejo que se haya descubierto nunca, cubría el suelo de una de las tres principales salas de recepción de la Casa del Fauno en Pompeya. Está confeccionado con un número incontable de piedrecita que oscilan entre un millón y cinco millones. Eso sí que fue un verdadero rompecabezas.

EN la palestras de una de las principales termas de la ciudad de Pompeya había un reloj que permitía a los atareados hombres que acudian a bañarse o a hacer ejercicio saber la hora. El reloj tenía una inscripción en osco, primitiva lengua prerrománica de la región, en la que se informaba que fue pagado con el dinero que el ayuntamiento había obtenido de las multas. Entonces la ORA servía para dar la hora.      

RESULTA divino que la mano de Dios en la tierra sea tan humana.

APUNTES