LO DIVINO Y LO HUMANO

DOS GEMELAS viven en el mismo portal pero en pisos diferentes. C. en una charla de ascensor le comentó a una: "vaya lío que os tenéis que formar entre vosotras". "El lío lo tendrás tú". C. fue un policía destinado al subsuelo y eso se nota. Las gemelas cuando entran en el portal si no saben a qué piso ir llaman a C. Caso resuelto. Con lo bien que queda uno  hablando en el ascensor del tiempo.

X. NO ENTIENDE los sermones del cura de Cangas de Onís. X. prefería los del anterior. No es lo mismo hablar de lo divino que de lo humano. Se entiende mejor lo que no se ve porque no necesita explicación. A J.M, el cura actual, lo trasladan a Villaviciosa y en los establecimientos hosteleros se están recogiendo firmas y organizando oraciones laicas para que no lo trasladen.  

ME COMENTA AU. que este año debido a las lluvias los árboles tienen un porte mayor. AU. me habla de la agradable sombra de la higuera. Me acuerdo lo que le gustaba a mi madre conceyar a la sombra de la figar que había delante de casa.

EN LA VIGA saliente de una casa abandonada había un nido de papamoscas. En asturiano "mosqueru". Los padres, con su porte erguido, estaban al acecho de mosquitos para alimentar a los polluelos.  En esta época sabemos del inicio del vuelo de las crías porque chocan contra los cristales de la casa.

AL OSCURECER siento una empacadora, mientras con los prismáticos intento ver alguna de las lunas de Júpiter, M. guarda los últimos fardos en la tenada. El mundo y el trasmundo se mezclan en la noche. 

EN MI INFANCIA había un sonido durante la recogida de la hierba, el cantar de los carros del país. El freno era madera contra madera y eso producía el chirriar del carro. Gracias a lo que llamaban el "mean" del cerdo variaba la melodía. Me cuenta G. que cuando los carros llegaban a la plaza del mercado procedentes del puerto las autoridades los obligaban a lubricar los frenos con jabón, la estridencia molestaba a los señoritos de Cangas. Las últimas ruedas del carro de la familia adornan una portilla construida por G.   

APUNTES