miércoles, 4 de febrero de 2015

LA VERDADERA CARIDAD EMPIEZA POR UNO MISMO

Será verdad o será mentira lo que cuenta Leonardo Sciascia. Si es verdad cualquiera puede llegar a santo.Y si es mentira, pelillos a la mar.
San Pitopato

Dos cristianos, en cuanto supieron que los esbirros ya salían, fueron corriendo a la casa de san Pablo para ponerlo en guardia y rogarle que los rasurase enseguida porque les perseguían los esbirros. San Pablo sacó sus utensilios, se enjabonó la barba y comenzó a afeitarse. "¡Dios todopoderoso! ¿Te rasuras tú? ¿Es que no sabes que nos persiguen? ¿No sabes que puede que nos hayan visto entrar en tu casa? Tú no has de temer nada, porque eres amigo del rey, pero a nosotros nos descuartizarán. ¿Es que no tienes caridad? Y san Pablo, con calma: "La verdadera caridad empieza por uno mismo. Es verdad que soy amigo del rey, pero nunca se sabe lo que puede pasar...Más vale que resuelva primero mis asuntos. Luego, si queda tiempo y aún no os han degollado, os rasuraré a vosotros".

NEGRO SOBRE NEGRO
LEONARDO SCIASCIA

No hay comentarios:

Publicar un comentario