Te pasas la vida pidiéndome la Luna y este fin de semana, subido a la azotea, cuando casi la tenía a mi alcance vas y me dices que nunca me pediste la luna. Haber si ahora resulta que lo que querías era el Sol. Ya hice un sacrificio muy grande subiendo a la azotea, padezco vértigo, no pretenderás ahora que suba hasta el astro Rey como Leticia. La tierra y la luna se atraen lo mismo que tú y yo, cada veintiocho días, así que mejor esperamos al Martes nueve de Septiembre que volverá La Superluna. No te fíes de la Luna que tiene una cara oculta y además es una mentirosa, cuando tiene forma de C decrece y cuando la tiene de D crece. Mientras vuelve y no vuelve, mejor escuchamos a Sergio Dalma, que mola mazo (me estoy volviendo pijo): Yo no te pido la luna.
jajaj tienes de tou.
ResponderEliminarTengo de todo, como en botica.
EliminarLas mujeres siempre nos piden la luna, hasta que la consigues y cambian de deseo.
ResponderEliminarLos dos primeros Astronautas que pusieron el pie en la luna Amstrong y Aldrin lo hicieron por encargo de sus mujeres.
Eliminar