Yo, vago de nacimiento, solo hago dos cosas desde que me levanto hasta que me acuesto, comer y contar nubes. Lo de levantarse es un decir pues de la cama paso directamente a la hamaca. La vista es la que trabaja. En el último reconocimiento médico se me detectó vista cansada. Este año hubo mucha nube. Cómo ya no puedo vivir del aire, voy a solicitar una pensión de invalidez. Para un inútil como yo es cosa fácil. Soy vago desde que tengo uso de razón, bueno, para ser sincero, desde que tengo razón sin uso. Un día escuché a Eduard Punset preguntar: ¿Los vagos cuando mueren suben al cielo o los vienen a buscar? Y como nadie supo responder, me volví vago. Porque yo al cielo no pienso subir solo y él que manda allá arriba, uno al que llaman Dios, no va a venir a buscarme. Trabajó seis días y al séptimo descanso, desde entonces seguimos sin noticias del Creador. Menuda chapuza que nos dejó. Además con La Reforma Laboral ya no pisa más la tierra. Qué va hacer Dios con 20 días por año, si solo trabajó seis días. La mejor medicina para retrasar la partida es: "la vagancia productiva".
Esta foto si que da juego. |
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