sábado, 2 de mayo de 2009
viernes, 1 de mayo de 2009
BALZAC Y LA JOVEN COSTURERA CHINA
El libro de Dai Sijie-los chinos ponen primero el apellido- es autobiográfico y trata de dos adolescentes cuyos padres son "enemigos del pueblo", estos son enviados a una aldea perdida en las montañas del Fénix del Cielo, cerca de la frontera con el Tibet, y así cumplir el proceso de "reeducación" implantado por Mao - no confundir con Mahou, el de la cerveza- cuanto mejor hubiera sido para los chinos el Mahou cinco estrellas. Pues bien, en esta aldea remota, de traficantes de opio reconvertidos en campesinos - con lo bien "colocados" que estaban antes - es donde nuestros dos adolescentes pasan toda clase de penalidades hasta que encuentran una maleta llena de libros de Balzac, Dumas, Stendhal.
...Aquel librito de Balzac se llamaba"Ursula Mirouët" (...) Imaginen a un joven virgen de diecinueve años, que dormitaba aún en los limbos de la adolescencia y sólo había conocido la cháchara revolucionaria sobre el patriotismo, el comunismo, la ideología y la propaganda. De pronto, como un intruso, aquel librito me hablaba del despertar, del deseo, de los impulsos, de las pulsiones, del amor, de todas esas cosas sobre las que el mundo, para mi, había permanecido hasta entonces mudo.
...Me zambullí literalmente en el poderoso río de aquellos centenares de paginas. Era para mí el libro soñado: al acabar de leerlo, ni la maldita vida ni el maldito mundo volvían a ser como antes. Lo anterior referido al libro de Romain Rolland Jean- Cristophe.
Pues bien los dos jóvenes descubrieron un mundo repleto de poesía, sentimientos y pasiones desconocidas, y aprendieron que un libro puede ser un instrumento muy valioso a la hora de conquistar a la atractiva costurera, la joven hija del sastre del pueblo vecino.
(...) El sastre tenía dos maquinas de coser. La primera , que llevaba siempre con él de aldea en aldea, era una vieja máquina en la que ya no se leía ni la marca ni el nombre de la fabrica. La otra era nueva, made in Shanghai, y la dejaba en casa, para su hija. Nunca llevaba a su hija con él durante esas giras , y aquella decisión, prudente pero implacable, hacía reventar de decepción a los numerosos jóvenes campesinos que aspiraban a conquistarla.
Bueno ya estoy agotado, la verdad ye que no "trabajo" nada la prosa, ni falta que me hace, es más, estoy pensando en contratar a un negro- mejor una negra- para que me haga estas entradas y yo pueda hacer algunas salidas.
No os perdáis las aventuras de estos adolescente, pues yo las tuve relegadas durante años y ahora me pesa tanto que voy a meter el libro conmigo en la cama. Saludos.
jueves, 30 de abril de 2009
CANTO A LA LIBERTAD
El último discurso de Allende debería bastar para que incluso quienes no comparten con él ninguno de sus pensamientos honren su vida. Hay un pasaje célebre que se ha repetido hasta la saciedad y que se ha hecho verso:
"Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre para construir un sociedad mejor". En esas palabras está el nudo de la moraleja: ¿era Allende quien perseguía construir una sociedad mejor o era Augusto Pinochet, Richard Nixon y Henry Kissinger quienes lo hicieron?
Las Manos cortadas de Luisgé Martín. Lo mejor que leí en los últimos años.
Esta entrada dedicada a Latía
miércoles, 29 de abril de 2009
EL ÁRBOL
En la isla Lenox hay un árbol. Uno. Indivisible, vertical, terco en su terrible soledad de faro inútil y verde entre la bruma de los océanos.
Es un alerce ya centenario y el único sobreviviente de un pequeño bosque derribado por los vientos australes, por las tormentas que hacen risible la idea cristiana del infierno, por la implacable guadaña de hielo que siega el sur del mundo.
¿Cómo llegó hasta ese lugar reservado al viento?
Según los isleños de Darwin o de Picton, transportado en el vientre de alguna avutarda, como semilla germinada y emigrante. Así llegó, llegaron, se abrieron camino entre las grietas de la roca, hundieron las raíces y se alzaron con la verticalidad más rebelde.
"Eran veinte o más alerces", dicen los viejos de las islas, que no tienen la mitad de los años del árbol sobreviviente ni llevan más de unos pocos en ese mundo donde el viento y el frío susurran: "Vete de aquí, sálvate de la locura".
Fueron cayendo uno tras otro con la lógica de las maldiciones marinas. Cuando el viento polar doblegó al primero y su tronco se partió con un rumor terrible, y que sólo se escuchará de nuevo-dicen los mapuches- el día en que se rompa el espinazo del mundo, empezó la condena del último árbol de la isla. Mas el camarada caído tenía en sus ramas el vigor de todos los vientos sufridos, de todos los hielos soportados, y su memoria vegetal fue sustento de los otros.
Así se hicieron fuertes, continuaron el desafío de tocar el cielo bajo de la Patagonia con las ramas, y así fueron cayendo, uno tras otro, de forma definitiva. Sin doblegarse en vergonzosas agonías, esos árboles azotados , desde la copa a la raíz, a las rocas, y a los vientos victimarios dijeron: "He caído, es cierto, pero así muere un gigante".
Uno quedó sobre la isla, El árbol. El alerce que apenas se vislumbra al navegar por el estrecho. Rodeado de muertos que son suyos, impregnado de memoria, y temporalmente a salvo de leñadores, porque su soledad no compensa el esfuerzo de atracar la nave y subir por las escarpadas rocas a tumbarlo.
Y crece. Y espera.
En la estepa polar, otros vientos afilan la guadaña de hielo que ha de llegar hasta la isla, que inexorablemente ha de morder su tronco, y , cuando llegue su día, con él morirán definitivamente los muertos de su memoria.
Pero mientras espera el inevitable fin, sigue vertical sobre la isla, altivo, orgulloso, como el estandarte imprescindible de la dignidad del Sur.
Luis Sepúlveda (La lampara de Aladino)
♪♫♫♪♫♫ MI ÁRBOL Y YO ♪♫♫♪♫♫
martes, 28 de abril de 2009
POEMAS ENCADENADOS
PARA TI
Aún no brotaron los versos
que para ti yo he sembrado.
¡¡ Y mira que puse esmero
en las labores de siembra !!
Los aboné con cuidado…
No les faltó nunca el riego…
De plagas los he librado…
Pero la tierra es la tierra.
Si no hay calor, no hay arado
ni agua, ni azada, ni apero
que haga salir la cosecha.
Y el calor, amigo mío,
el calor…viene de fuera…
Y PARA MÍ
Éstos siguen en barbecho…
No está en buenas condiciones
para la siembra el terreno.
Esquivo y apelmazado.
Reticente y desconfiado.
El fondo del pozo seco.
Sin agua los cangilones.
Más empinado el repecho.
No hay forma de hacer derecho
ni un surco con el arado.
Me aprieta el corsé en el pecho...
¡Si yo no llevo corsé!
¿Qué es lo que me aprieta pues?...
No hay forma de arar ni un trecho.
No está retrobateado
el terreno. Lo sospecho…
Ablandar es lo primero
que exigen estas labores.
¿Terrones...deshacer puedo?
¿Airear y oxigenarlo?...
Tendré más bien que intentarlo
si obtener frutos pretendo...
Y eliminar sinsabores...
si quererme es lo que quiero.
(Karen Dinesen) SERONDA
P.D. Para mi es un lujo, que la autora de estos dos poemas me permita ponerlos en mi blog.
Aún no brotaron los versos
que para ti yo he sembrado.
¡¡ Y mira que puse esmero
en las labores de siembra !!
Los aboné con cuidado…
No les faltó nunca el riego…
De plagas los he librado…
Pero la tierra es la tierra.
Si no hay calor, no hay arado
ni agua, ni azada, ni apero
que haga salir la cosecha.
Y el calor, amigo mío,
el calor…viene de fuera…
Y PARA MÍ
Éstos siguen en barbecho…
No está en buenas condiciones
para la siembra el terreno.
Esquivo y apelmazado.
Reticente y desconfiado.
El fondo del pozo seco.
Sin agua los cangilones.
Más empinado el repecho.
No hay forma de hacer derecho
ni un surco con el arado.
Me aprieta el corsé en el pecho...
¡Si yo no llevo corsé!
¿Qué es lo que me aprieta pues?...
No hay forma de arar ni un trecho.
No está retrobateado
el terreno. Lo sospecho…
Ablandar es lo primero
que exigen estas labores.
¿Terrones...deshacer puedo?
¿Airear y oxigenarlo?...
Tendré más bien que intentarlo
si obtener frutos pretendo...
Y eliminar sinsabores...
si quererme es lo que quiero.
(Karen Dinesen) SERONDA
P.D. Para mi es un lujo, que la autora de estos dos poemas me permita ponerlos en mi blog.
♪♫♫♪♫♫ PACHELBEL♪♫♫♪♫♫
lunes, 27 de abril de 2009
domingo, 26 de abril de 2009
ASUNTOS MATRIMONIALES
IONESCO Y SU VIUDA PREMATURA
Comiendo con Ionesco y su mujer: Cuando está con la mujer no rinde ni una décima de si mismo. Ella le riñe porque come, porque bebe, porque fuma. "Esta mujer", me susurra al oído, Tiene una irresistible vocación a la viudez. Querría que viviese como si estuviese muerto". Y come, bebe y fuma.
Diarios inéditos del Italiano Indro Montanelli, escritos entre 1957 y 1978.
Leído hoy en el Periódico El País.
¿QUIÉN DIJO?
ERES LA ÚNICA MUJER DE MI VIDA
sábado, 25 de abril de 2009
DE VISITA
Cuando cierres la puerta, no hagas ruido.
La casa bulliciosa
olvirá tu paso al poco de irte
como se olvida un sueño desabrido.
No te valdrá el amor ni la paciente
entrega a su cuidado.
Marchate silenciosa
suavemente.
Entre sus moradores alguien crece
para quién defendiste la techumbre,
los muros y los altos ventanales
donde la luz cernida comparece
cada nueva mañana.
Es la costumbre:
Permanecer no entraba en el contrato
y ahora debes partir. De todos modos,
no pensabas quedarte mucho rato.
Joan Juristi
P.D. Poema dedicado a una buena persona, muerta recientemente, descanse en Paz.
viernes, 24 de abril de 2009
Suscribirse a:
Entradas (Atom)