martes, 31 de marzo de 2009
EVOLUCIÓN FAMILIAR
domingo, 29 de marzo de 2009
CÓSIMA
PRINCIPIOS
Es una fortuna caminar en compañía de gente sabia, divertida y escéptica, que esté dispuesta a cambiar cualquier verdad absoluta por un queso de cabra, cualquier honor, premio o reconocimiento por la corona de un sombrero de paja, cualquier clase de eternidad por la embriaguez de la duda unida a la armonía de la naturaleza. Por el contrario, encontrarse con gente de principios sólidos e inalterables es el peligro más grave que puede correr uno en esta vida. Un hombre de principios fue aquel que, sintiéndose puro, arrojó la primera piedra contra la adúltera; es el mismo que te indica con el dedo el camino recto que debes seguir y en cuanto te desvíes será el que te delate, el que te incluya en la lista negra o borre definitivamente tu nombre del mapa. En el caso en que este hombre de principios obtenga un poder absoluto, si además es muy devoto, no dudará en mandarte a la horca rezando por tu alma sin ahorrarse las lágrimas, puesto que también se puede llegar a la extrema violencia a través de la piedad. Huye de ese ser misericordioso que busca tu salvación por medio del terror del espíritu y te obliga a desayunar cada mañana con una rueda de molino. No es ninguna broma aquello que dijo Groucho Marx: "Éstos son mis principios, Si no le gustan, tengo otros". El fanático es capaz de saltar de un risco al risco contrario, ambas cimas situadas a la misma altura bajo un cielo nítido y puro, donde se siente igual de seguro, aunque armado esta vez con distinto látigo. El dogma es una forma de locura, del mismo modo que la pureza extrema alcanza a veces la forma de la más refinada crueldad. Los principios inalterables nos fueron inoculados en una edad muy temprana cuando nuestro cerebro estaba aún desvalido. En la mayoría de los casos aquellos principios fermentaron y se diluyeron en la inteligencia, en la imaginación y en el placer de los sentidos; pero hay personas que conservan incólumes aquellos mitos de la infancia en su cerebro de reptil sin que encuentren salida sino a través de los latidos de sangre que conforman su pensamiento. Hoy es un domingo de primavera y hay dos clases de desayuno. Por un lado, café, tostadas, queso de cabra y alguna duda relativa; por otro, principios inalterables y ruedas de molino.
Manuel Vicent
P.D. Yo me desayuno con muchas dudas relativas. Le dedico esta canción de Paquita la del Barrio a cierto ministro de Defensa de triste recuerdo, uno de los que nos quiere hacer comulgar con ruedas de Molino.
sábado, 28 de marzo de 2009
ESPECIAS PROTEGIDAS
Estos envíos son de Latia, ella será la condenada al fuego del Infierno. Que más quiere ella...Tan agustito, tan calentito. Y creo que van a condenar a su cantante preferido Alejando Fernández, por esta canción: ♪♫♫♪♫♫ MATALAS. ♪♫♫♪♫♫
viernes, 27 de marzo de 2009
jueves, 26 de marzo de 2009
MI FAMILIA Y OTROS ANIMALES
Tengo una familia de lo más confiada, me dejaron al cuidado de la fauna domestica. No les quedó más remedio, ¡era un caso de emergencia nacional!.
P.D. Mi familia y otros animales es un libro de Gerald Durrell, que leí hace unos años y que me gustó. Está ambientado en la isla griega de Corfú y una de las cosa que me llamó la atención fue unas luminosidades que el protagonista veía sobre las aguas de la mar. Ahora, después de haber leído a Sebal y los anillos de Saturno, eran bancos de arenques muertos.