Mucha gente vive una vida que no es la que quisiera vivir y eso produce infelicidad. El narrador conoce a Max en un taller literario y ambos se hacen amantes ocasionales hasta que se enfria la relación y Luisgé Martín deja de saber de Max. Luisgé juega a hacernos creer que autor y narrador son la misma persona. Después de mucho tiempo Max aparece de nuevo en la vida de Martín como una sombra de lo que fue. Los dos capítulos del libro se pueden considerar como dos novelas. El primero trata de la vida de Max. El segundo de la de Elias. Sabemos que la madre, a la que odia, se llama Aurora y el padre Elias. En definitiva tres personas que vivieron vidas equivocadas. El hijo odia a los padres, sobretodo a la madre, por haberle traído al mundo. La madre es una pobre mujer que se casó con alguien al que no quería y Elias siempre tuvo el oscuro deseo de los amores equivocados. La felicidad está a la vuelta de la esquina o en la salida del armario. Magnifica novela de un autor que me gusta, entre otras cosas, por como trata los temas escabrosos de la vida. Las manos cortadas, Los amores confiados y la misma ciudad, son tres novelas que leí de Luisgé Martín.
Le contó las cosas que no se deben contar a un hijo: los deseos escondidos, las flaquezas, los sueños en los que creyó extraviadamente, la sexualidad oscura de Marilina y de Isabel. En ningún lugar hay nada que permanezca.