miércoles, 2 de junio de 2010

COMER O NO COMER



"Anoche tomé una típica cena exenta de colesterol: calabacín hervido, leche descremada y gelatina. No creo que me permita vivir mas, pero estoy seguro que la vida me parecerá mas larga"
Groucho Marx

COMER

Si Alguien está tentado a establecer un vínculo automático entre las proteínas y la agresión, no hay que olvidar que Hitler era vegetariano

Una "marquesa vivaracha", que compartía la suposición común de que el alto pensamiento debería ir acompañado de una vida austera, topó una vez con el filosofo René Descartes ingiriendo más de lo que era estrictamente necesario para sustentar a un eremita. Cuando ella expresó su sorpresa, Descartes contestó:
"¿cree usted que Dios hizo las cosas buenas sólo para los idiotas?

NO COMER

Pomponio Ático fue un corresponsal de Cicerón. Cuando Ático cayó enfermo, y los intentos médicos de alargarle la vida sólo servían para prolongarle el dolor, decidió que la mejor solución era morirse de hambre. En aquel tiempo no hacía falta pedírselo a un tribunal alegando el deterioro terminal en "tu calidad de vida". Ático, que era un antiguo liberto se limitó a informar de su intención a familiares y amigos , y a continuación rechazo la comida y se dispuso a esperar el fin. Su plan se vio frustrado. Milagrosamente, la abstinencia resultó ser la mejor cura de de su mal (no identificado); y pronto el enfermo empezó a mejorar a ojos vistas. Hubo mucho regocijo y fiesta; quizá los médicos incluso retiraron sus honorarios. Pero Ático interrumpió la alegría. Puesto que todos debemos morir algún día, anunció, y puesto que ya he dado tan buenos paso en esa dirección, no deseo volverme atrás ahora, sólo para tener que empezar de nuevo. Y así, para admirada consternación de todos los que le rodeaban, Ático siguió negándose a comer hasta que sobrevino su muerte ejemplar.

Esta cosecha fue recogida en las novelas de Julian Barnes, "El perfeccionista en la cocina", "Nada que temer" (Anagrama).
El lunes leí un articulo de Cesar Antonio de Molina en el País : "El diablo de la cultura" y que entre otras cosas interesantes, nos cita lo que Montaigne escribió en su "De libros" :
"Que vean, por lo que tomo prestado, si he sabido elegir con qué realizar mi tema. Pues hago que otros digan lo que yo no puedo decir tan bien"

viernes, 28 de mayo de 2010

LA VIDA


Coged de vuestra alegre primavera
el dulce fruto, antes que el tiempo airado
cubra de nieve la hermosa cumbre;

marchitará la rosa el viento helado.
Todo lo mudará la edad ligera
por no hacer mudanza en su costumbre.

Garcilaso de la Vega



  Es bien sabido que la vida gira y gira como un molino de viento y en su rueda nos va moliendo. Allí se hacen harina las esperanzas y los ideales, los temores y las ambiciones. Al cabo de un tiempo, ya nos somos los orgullosos granos que se mecían en las doradas espigas sino un polvo maleable con que amasar otras formas.
He comprendido que la vida prometida no está al final de ningún viaje sino que es el viaje mismo, el artificio sobre el que surcamos los mares de la vida, la barca de sueños que nos mantiene a flote entre las inclemencias del mundo.

El Converso
José Manuel Fajardo


EL MEJOR PRETEXTO

¡Es tan frágil la vida,
tan efímero todo!
(¿No es verdad, amiga,
ojos de color musgo?)

Y al mismo tiempo es fuerte,
por ese deseo
de enfrentarse a la muerte
cuando aumenta la edad.

Así, a los treinta y siete,
cerrados unos ciclos,
la vida aún nos pide
más sentimientos.

Más unión que la que nos dio
la furia de vivir,
son ésos descubrimientos
después de que hallamos sabido

que la vida no es otra
sino aquella que hacemos
(la vida es una sola
pues jamás volverá).

Los que nos hacen más partidarios
de la vida, que de lo que está vivo,
digámosle «¡no!» a todo
cuanto tenga otro sentido.

¡Y qué mejor pretexto
(¡quién lo sepa, dígalo!)
habrá para vivir,
más que la propia vida?

Alexandre O´Neill

P.D. La foto es del monte Fuji y del lago Kawaguchiko, realizada por el fotógrafo filandés Jukka Vuokko. Los dos tercetos son del soneto XXIII de Garcilaso de la Vega. Alexandre O´Neill es  un poeta portugués, y el poema no se parecerá nada al original, pues me ti yo la gamba. Se admiten mejoras en el mismo. El texto es de la novela el Converso de José Manuel Fajardo, que leí hace unos años, me gustó y lo anoté en mi libretina de notas.

miércoles, 26 de mayo de 2010

CREÍA QUE MI PADRE ERA DIOS

Creía que mi padre era Dios
Paul Auster
Anagrama

En una entrevista radiofónica que Rebeca Davis realizó a finales de septiembre de 1999 a Paul Auster, este invitó a los oyente a que enviaran algunas historia verdaderas al programa de radio de Rebeca. La respuesta fue abrumado: más de cuatro mil relatos, de los que Paul Auster seleccionó y editó ciento ochenta, y que componen el volumen. Uno de los relatos que más me gustó es el que da nombre al libro.





CREÍA QUE MI PADRE ERA DIOS

Lo que voy a contar sucedió en Oakland, California, al final de la Segunda Guerra Mundial. Yo tenía seis años. No sabía entonces lo que era la guerra pero sí era consciente de alguna de sus consecuencias. El racionamiento, por ejemplo, ya que yo tenía una libreta de racionamiento con mi nombre. Mi madre la guardaba junto con las libretas de mis hermanos. Recuerdo los apagones las alarmas antiaéreas y los aviones de combate volando sobre mí. Mi padre era patrón de un remolcador y recuerdo que hablaba de buques de transporte de tropas, de submarinos y de destructores.
También recuerdo a mi abuela llevando tocino a la carnicera para ser reciclado y acudir al edificio federal que estaba en el centro de la ciudad para arrojar los restos de papel de aluminio por las ventanas que habían acondicionado para tal fin en la fachada que daba a la calle.
Pero lo que mejor recuerdo es al señor Bernhauser. Era nuestro vecino de atrás y era especialmente malvado y antipático con los niños, además de ser grosero con los mayores. Tenía un ciruelo italiano cuyas ramas colgaban por encima de la valla trasera de nuestro jardín. Si las ciruelas colgaban de nuestro lado, podíamos cogerlas, pero Dios nos librara de traspasar la valla. Se desataban truenos y centellas. Nos gritaba e insultaba hasta que alguno de mis padres acudía a ver qué era todo aquel alboroto. Normalmente venia mi madre, pero aquella vez lo hizo mi padre. El señor Bernhauser no le caía bien a nadie, pero mi padre le tenía una manía especial porque nunca nos devolvía los juguetes y la pelotas que caían en su jardín. Así que allí estaba el señor Bernhauser gritando que nos fuéramos al infierno y dejáramos su árbol en paz, cuando mi padre le preguntó qué era lo que pasaba. El señor Bernhauser tomó aliento y lanzó una diatriba contra los niños ladrones, los transgresores de la ley que robaban fruta y contra los monstruos en general. Creo que a mi padre se le colmó la paciencia, porque lo que hizo a continuación fue gritarle al señor Bernhauser que se muriera. El señor Berhauser dejó de gritar, miró a mi padre, se puso colorado, después morado, se llevó la mano al pecho, se puso gris, se fue doblando lentamente y cayó al suelo. Que mi padre le gritase a un viejo miserable ordenándole que se muriera era algo que escapaba a mi comprensión. Creía que mi padre era Dios.
Recuerdo que Ray Hink vivía al otro lado de la calle. Estábamos en el mismo curso y su abuela vivía en el piso de arriba. Era una ancianita pequeña que siempre llevaba un vestido de cuello alto. Se sentaba al lado de la ventana con unos prismáticos de opera y vigilaba al vecindario. Si nos portábamos bien, nos dejaba mirar por los prismáticos y oler los pétalos de rosas que guardaba en un jarrón de alabastro encima de una mesa. Decía que los pétalos de rosa venían de Alemania y que el jarrón era de Grecia. Una tarde me dejó sus valiosos prismáticos y me puse a mirar la calle. Llegó un taxi y un joven alto y delgado, vestido de marinero, descendió del coche. Estrechó la mano del taxista, que acababa de sacar su petate del maletero, y supe inmediatamente que se trataba de mi tío Bill que volvía de la guerra. Mi abuela bajó la escalinata del portal y le abrazó. Estaba llorando. Recuerdo las estrellas que colgaban en las ventanas de las casas de nuestro vecindario. Mi abuela me dijo que eran porque habían perdido a un hijo en la guerra. Yo estaba contento de que no hubiese ninguna estrella en nuestra ventana. Aquella noche celebramos una gran fiesta en honor del tío Bill. Me fui a dormir feliz porque mi tío había vuelto a casa sano y salvo. Nunca volví a pensar en el señor Bernhauser.

Robert Winnie
Bonners Ferry, Idaho

lunes, 24 de mayo de 2010

LA MEMORIA Y LA MUERTE



"El tiempo lo ha hecho Dios; nosotros sólo hacemos las horas"



Sólo son tuyas -de verdad- la memoria y la muerte,
la memoria que borra y desfigura
y la sombra de la muerte que aguarda.
Sólo fantasmales recuerdos y la nada
se reparten tu herencia sin destino.
Después de sucios tratos y mentiras,
de gestos a destiempo y de palabras
-irreales palabras ilusorias-,
sólo un testamento de ceniza
que el viento mueve, esparce y desordena.

Juan Luis Panero

EMBOTELLAMIENTO

miércoles, 19 de mayo de 2010

HASTA NUNCA

"Reloj de arena tu cuerpo.
Te estrecharé la cintura
para que no pase el tiempo”

Aquilino Duque

" Todos los días nos despedimos de personas, a las que ya no veremos más"

No había esta mañana en mis calles habituales quien me rescatara de la angustia por la fuga del tiempo y me he quedado en ellas más de lo normal, recordando los rostros de aquellos transeúntes que fueron habituales del barrio y un día, sin que en un primer momento nadie lo percibiera, se desvanecieron para siempre en el opaco vacío de la relojería universal. ¿Qué fue de todos ellos? Formaron parte de mi vida en otros tiempos, y luego se borraron. Me he acordado de Pessoa, que se preguntaba por el viejecito redondo y colorado del puro habano a la puerta del estanco. Y por el dueño del estanco. Todos habían ya partido hacia el reino de la luz del otro barrio. "Mañana", escribía Fernando Pessoa, también despareceré yo de Rúa da Prata, de Rúa dos Douradores, de Rúa dos Franqueiros. Mañana, también yo, sí, mañana yo también seré el que dejó de pasear por estas calles, el que otros vagamente evocarán con un que habrá sido de él. Y todo cuanto hago, todo cuanto siento, todo cuanto vivo, no será más que un transeúnte menos en la cotidianidad de las calles de una ciudad cualquiera."
Dietario Voluble
Enrique Vila -Matas



Suavemente suena la puerta de la cocina, la Sra. O’Brian la abre, al otro lado se encuentra su mejor inquilino, el Sr. Ramirez con dos agentes de policía. El Sr. Ramirez ha sido su inquilino durante 30 meses, seis más de los que le permitía su visado temporal. En ese tiempo se adaptó a la brillante prosperidad de su nueva vida, trabajó en la fábrica de aeroplanos durante la guerra, se compró una radio, y un reloj de pulsera, y disfrutó del modo de vida americano.
“Pues aquí estoy, para decirle que debo abandonar mi habitación.” -dice el Sr. Ramirez. Mirando una vez más la brillante cocina, la mesa bien surtida en la que los hijos de la Sra. O’Brien están comiendo sus filetes.
“Ha sido Vd. un buen inquilino.” -dice la Sra. O’Brian- que le recuerda una visita que hizo a algunas ciudades fronterizas de México, los grillos, las polvorientas carreteras, las ropas raídas.
“Lo siento mucho, Sr. Ramirez.”
“Adiós Sra. O’Brian. Vd. ha sido buena conmigo. Adiós Sra. no nos volveremos a ver nunca más”

Los policías sonríen al oír esa expresión, pero su sonrisa se desvanece pronto, se llevan al Sr. Ramirez, la Sra. O’Brian vuelve a su brillante cocina, sus hijos la apremian porque se le enfría el filete, se sienta a la mesa y empieza a comer. Mastica su primer bocado muy lentamente y dejando los cubiertos sobre la mesa, fija su mirada en la puerta cerrada. “¿Qué pasa, Mama?” pregunta su hijo. “Acabo de caer en la cuenta -contesta ella con gran pena- que nunca más veré al Sr. Ramirez.”


Ray Bradbury
Rúa Dos Franqueiros (1906)



lunes, 17 de mayo de 2010

POSTALES DESDE LA TUMBA

UN TIPO QUE se pasa la vida diciendo yo, yo, yo, es un ególatra. Otro que hace lo mismo diciendo nosotros, nosotros, nosotros, es un nacionalista. El nacionalismo no es más que la forma plural de la egolatría.
Fernando Aramburu


Postales desde la tumba de Emir Suljagic más que una novela es una crónica de la condición humana. Emir Suljagic con tan sólo veinte años fue uno de los pocos que lograron sobrevivir a la terrible matanza que se produjo en la ciudad fronteriza de Srebrenica, en la que en cuatro días desaparecieron una ciudad entera, su población y su pasado común, y todo ello ante la pasividad de los cascos azules holandeses allí destinados.

Mientras observaba petrificado cómo los vehículos entraban en la localidad, pregunté a un oficial holandés qué ocurría, más por la necesidad de recibir unas palabras de aliento que en busca de una verdadera respuesta. Con una sonrisa sarcástica me comento. "Viene Ratko Mladic para evacuaros".

Los serbios desde el año 1992 llevaban a cabo una limpieza étnica de musulmanes en los pueblos de bosnia oriental, en julio de 1995 entran en la ciudad de Srebrenica. Esta novela es la crónica de esos tres años de acoso hasta la total destrucción de la ciudad.
La población de Srebenica, no sólo tuvo que padecer el acoso de los serbios y la pasividad de los cascos azules, sino también la de sus propios "señores de la guerra". Naser Oric y sus hombres "administraban" toda la ayuda humanitaria. En informes posteriores se supo que habían organizado el mercado negro. En estos informes se enumeran a lo largo de varios folios los nombres de todos los revendedores, la manera y lugar de comerciar con los serbios, los artículos en circulación más abundantes. Ahora bien, cuando las cosas se pusieron complicadas fueron los primeros en abandonaron la ciudad. Naser Oric se encuentra arrestado por el Tribunal Internacional de la Haya, acusado de crímenes de guerra.
Estas pocas lineas de la novela reflejan muy bien el padecimiento de muchos seres anónimos:

Aparece en la esquina, sonriendo, tal vez dirigiéndose a su familia, seguro de que ellos nunca verán esta imagen, pero como si presintiera que es el único documento, la única prueba de su existencia. En esta foto él no tiene nombre, es sólo un desconocido, un intruso en una foto ajena, porque no se podía permitir pagar diez marcos por una fotografía. Ésta es la gente en la que pienso, figuras sin nombre ni identidad que se convertirán en números anónimos. Cuántos de ellos estuvieron allí, cuántos no aparecieron allí donde habían estado el día anterior y no los echamos de menos porque otros ocuparon sus sitios para desvanecerse igualmente. Desaparecían en silencio, tan sigilosos como lo había sido su existencia, como si no hubieran hecho más que dejar de pasear por el mercado mirando con ojos hambrientos todo lo que no podían comprar.


P.D. Esta novela es del año 2008 y está publicada en Galaxia Gutenberg. Nunca me decidía a leerla por la dureza de los hechos. Ahora creo que es una novela de obligada lectura.

martes, 11 de mayo de 2010

EL ARTE DE LO IMPOSIBLE (M C ESCHER)

AIRE Y AGUA
Obra influida por los entramados decorativos de la Alhambra, que tanto impresionaron a Escher así como dos de los elementos platónicos: el aire y el agua, casi siempre representados en su obra por peces y aves. El diseño de esta obra es relativamente sencillo en comparación con otras suyas, pero Escher es consciente que el valor principal del arte está en la idea creadora.


CASCADA

¿Puedes creer que el agua de una corriente está permanentemente bajando y sin embargo, al final de su recorrido, termina a la misma altura a la que empezó? . Esto es totalmente increíble en la vida real pero para Escher nada hay imposible.

Si comienzas por fijar tu vista en la parte alta de la cascada verás que el agua cae verticalmente para posteriormente seguir descendiendo por un canal. Pero...¡sorpresa! Tras todo este recorrido descendente nos encontramos de nuevo donde empezamos ¡ en la parte alta de la cascada !. La obra presenta otras curiosidades como los geométricos remates de las torres, la señora tendiendo ropa, las rarísimas plantas y las laderas abancaladas del fondo.


BELVEDERE
Una extraña construcción tiene columnas a la vez adelante y atrás. ¿Imposible? Compruébalo

MANOS

El juego de dos-tres dimensiones es el protagonista de esta obra. Desde un dibujo plano, surgen unas manos que van tomando volumen y convirtiéndose en reales. Una mano pinta a la otra creando un mundo aislado y enigmático. Lo plano y lo corpóreo se mezclan progresivamente y nos hace sentir que la realidad surge de la nada.

Para aumentar el contraste entre lo plano y lo tridimensional, el papel del que surge todo está fijado a la superficie mediante chinchetas. Por tanto, las manos son una aparición, han surgido de la nada y pintan, todo ello desde un simple papel, el colmo.





RELATIVIDAD

Si contemplas esta obra con atención te vas a volver loco/a. Según Escher todo es relativo, y aquí lo demuestra fehacientemente. Si alguien te dice que en un mismo tramo de escalera dos personas, colocadas en el mismo sentido de marcha, una sube y la otra baja, lo considerarías imposible. Pues aquí lo tienes representado. Es como si fuesen dos mundos distintos pero juntos, dos dimensiones en una.

Realmente es mareante comprobar como un tramo de escalera es utilizado por sus dos partes, arriba y abajo ¡ y sin embargo las dos personas bajan !.

Todo se mezcla, arriba-abajo, frontal-lateral, etc. La ausencia de color (es una grisalla) y el rayado de las superficies consigue aumentar el efecto de confusión que la obra nos produce.




MAURITS CORNELIS ESCHER

Nació el 17 de junio de 1898 en Leenwarden (Países Bajos), hijo de un ingeniero hidráulico. Era un pésimo estudiante que tuvo que repetir curso dos veces. Para él la escuela era una pesadilla, excepto las clases de dibujo. Como tantos otros grandes artistas, era zurdo. Su profesor F.W. van der Haagen le enseñó la técnica de los grabados en linóleo y fue una gran influencia para el joven Escher.
A lo largo de su carrera realizó más de 400 litografías y grabados en madera, y también unos 2.000 dibujos y borradores. De muchos existen decenas de reproducciones, cientos e incluso miles de otros. Al final de su carrera destruyó algunas de las planchas para que no se realizaran más reproducciones de originales. También existen estudios y borradores de muchas de sus obras, en ocasiones también varias versiones de algunas de ellas. Muchas de su obras se vendieron masivamente poco después de su muerte y están esparcidas por el mundo. Un grupo importante está expuesto de forma permanente en el Museo Escher en La Haya, Holanda.

lunes, 10 de mayo de 2010

ALEGORÍA DEL ÁRBOL DE LA VIDA


Mira que te as de morir
mira que no sabes cuando.

Mira que te mira Dios
mira que te esta mirando

Alegoría del árbol de la vida (Ignacio de Ries). Esta pintura se encuentra en la capilla de la Concepción, en la catedral de Segovia. Esta capilla fue adquirida en 1645 por Don Pedro Fenández de Miñano y Contreras gobernador de Cádiz y almirante de la flota de la plata al servicio del rey Felipe IV para servir de enterramiento familiar.


ARCO

Cada flecha es un día. Tiene un punto
cercano al sol, y luego, exhausta, baja.
El arco que dispara tanta flecha
pudiera ser la vida. Si quebrara
su duro nervio, el ansia moriría.

Julio Martínez Mesanza
De "Europa" 1986


ADIVINANZA

Una dama galana y hermosa
con doce galanes se sienta en la mesa;
el uno la toma el otro la deja,
se casa con todos y no es deshonesta.


viernes, 7 de mayo de 2010

QUEMAR LOS DÍAS


“Sólo cuando aceptas que eres mortal, y eso nunca ocurre al principio, empiezas a comprender que la vida y la muerte son la misma cosa”.

James Salter nos cuenta en sus memorias, "Quemar los días" ,que cuando Jhon Huston estaba en Roma dirigiendo una película, tenía una amante llamada Ilena, que también había sido acompañante de Faruk, el rey de Egipto que se encontraba exiliado en Roma. Lo había conocido en la consulta de un dentista . El estaba allí con su abogado, explicó ella, detalle que nadie podría inventarse, supuse, y descubrieron que vivían cerca el uno del otro y, empezaron a salir.
Los días de Faruk empezaban por la noche. Como un auténtico playboy, se levantaba tarde. Ella me lo describió. Era un hombre divertido. Le gustaban los buenos coches; tenía un Rolls y un Jaguar. Le encantaba comer. Habían ido juntos a Montecarlo, a las mesas de Chemin de fer donde, siendo un jugador prodigioso, se lo conocía como "la locomotora". La noche que se desplomó y murió en un restaurante de la Appia Antica en Roma, la dejaron marcharse por la puerta de atrás antes de la llegada de la prensa. El rey Faruk murió el 18 de marzo del 1965 por fartón.

En un álbum guardaba muchos recortes de prensa donde aparecían los dos, Huston con su barba blanca de patriarca. Era un coccolone: un hombre al que le gustaba que lo trataran como a un niño. También estaba mal de la cabeza, reconoció ella, y era muy tacaño.
-Sacarle mil dólares es dificilísimo-dijo.
Estaba en el otoño de una vida de gran actividad, una vida que no siempre se había vivido con arreglo a la razón. No tenía amigos, dijo ella, y no le gustaba salir. Vivía en una suite del Grand Hotel alimentándose a base de vodka y caviar. Ella lo telefoneaba.
"Jhon, ¿quieres unas chicas?"
"Tráelas-decía-. Vamos a divertirnos un rato."
Ella llevó a tres, una de ellas tenía dieciocho años; le gustaba na las chicas jóvenes, tiernas, explicó, y prefería la última hora de la tarde.

James Salter también conoció a Federico Fellini, en esa época se comentaba, que había sólo dos artistas auténticos en toda Europa, Picasso y Fellini. Picasso era anciano y remoto. Fellini era un hombre que se sentaba en mangas de camisa y que se parecía al de sus fotografías, arrugado, con vello negro asomando de las orejas, como un tío entrañable.
"Háblame", háblame" él no quería nada por escrito, se inspiraba escuchando, decía.

También andaba por allí Shara Churchill hija de Wiston Churchill, primer ministro británico. Era actriz, y apareció en el restaurante con paso inestable, tropezando con las mesas. Tenia los labios finos y una sonrisa de actriz siempre a punto. Vivía con un negro en la vía del Corso en un piso de altos techos, sin muebles, que olía a incienso. La puerta de entrada estaba revestida de acero y tenía cerraduras de seguridad.
El piso pertenencia a un mafioso, un hombre muy importante, me dijo el negro en confianza.
-¿Sabe todas esas estatuas que hay en Roma sin cabeza ? Pues él tiene las cabezas.
El piso sería muy cómodo después de unas reformas, me aseguró ella. Era una pelirroja de larga melena y piel pálida, y tenía un visible moratón en la mejilla y otro en el brazo. Churchil, su padre, aún vivía.
El negro se llamaba Lobo, era músico y pintor.

-¡ Ay Mami que será lo que quiere el negro!
-¡Que va querer fía, que te coma el Lobo!
-Oye Miner, esto no ye serio, y de la novela que nos cuentas, aparte de todo lo anterior.
-Pues mira Mary, la novela está bastante bien. En la primera parte James Salter, nos cuenta sus vivencias en West Point y sus años como piloto de las fuerzas aéreas americanas. En 1956, con 32 años, publicó su primera novela, "Pilotos de Caza". Y en la segunda parte lo que nos describe es el "ambiente", en ciudades como Nueva York, París y Roma. No siempre los personajes salen con sus verdaderos nombres, como por ejemplo aquella actriz que en mitad de un rodaje se negó a seguir a menos que le duplicaran los honorarios(...) También me enteraría de muchas cosas sobre ella: de que mascaba chicles a puñados, llevaba el pelo sucio, y, según la encargada del vestuario, le olía la ropa. También llegaba tarde con frecuencia, nunca se disculpaba, tenía mal genio y era mezquina, su novio...
No voy a contar toda la novela, bueno si queréis saber quién era la actriz, os daré una pista, la peli se titulaba Three.

jueves, 6 de mayo de 2010

LA UTILIDAD DE LA BEBIDA


"Los persas tienen la costumbre de discutir sus asuntos más importantes en estado de embriaguez, y al día siguiente se hacen repetir en ayunas lo que les había parecido bien de la discusión: si lo siguen encontrando bien en ayunas, lo aceptan; si no, renuncian a ello. Y , a modo de compensación, discuten de nuevo cuando están embriagados las cosas que ya han discutido en ayunas"
Heródoto
Historias


"Entre los macedonios los banquetes degeneraban con frecuencia en orgías, y una de las costumbres más corrientes de estos semibárbaros consistía en beber de un solo trago la famosa copa de Hércules, que, por grande que fuese la resistencia del bebedor, causaba una pesada embriaguez, y más de un juerguista caía, agotado por el efecto del vino"

Una noche un señor húngaro estaba jugando a las cartas con unos amigos en su castillo y, terminado el juego, los jugadores se pusieron a hablar de un enorme vaso de cristal de Bohemia que colgaba de la pared como un trofeo y cuya capacidad era mayor que la copa de Hércules usada por los compañeros de juego de Alejandro. Este vaso, dijo el castellano, era de un antepasado suyo, que lo llenaba de Tokay y lo apuraba de un solo trago. "¡Aquellos sí que eran bebedores!", exclamó uno de los jugadores, porque la admiración de los hombres es sobretodo por los grandes jugadores, los grandes bebedores, los grandes matarifes, y añadió: "Apuesto a que ninguno de nosotros consigue hacer lo mismo". "Acepto la apuesta", dijo el castellano, y, después de varias vertiginosas "pujas", acordaron apostar un millón de pengös, cantidad muy importante, porque esta memorable apuesta no tuvo lugar en nuestros días , sino en 1910. El vaso heroico se llenó de Tokay, el castellano, asiéndolo con ambas manos, por lo grande que era, comenzó a beber sin respirar, y bebió el vino hasta la última gota, después de lo cual, con el rostro ennegrecido como la luna por el eclipse, se cayó muerto sobre la alfombra. El millón de pengös fue pagado religiosamente a los herederos según lo convenido, y así fue como se supo que el castellano, habiendo perdido aquella noche a las cartas un millón de pengös, que era todo lo que tenía, había aceptado la apuesta como un sacrificio, a fin de alejar de su familia la amenaza de la miseria.

Alberto Savinio


La Tequilera (Lila Downs)

P.D. Esta mañana escuche una entrevista con el Señor Montoro en la cadena SER. El señor Montoro debía de estar todavía bajo los efectos de algún psicotrópico pues no se acordaba, entre otras cosas, de la Ley del suelo del gobierno de Aznar y Rato. Toda España edificable y, lo más grave, no había plazos para poner a edificar los terrenos de toda ¡Que viva España! Consecuencia, surgieron los especuladores, fundamentalmente en ayuntamientos y comunidades del PP. Madrid, Madrid, Madrid pedazo de la España... Todo esto, unido a la bajada de intereses ¡¡así la gente consume!! y a la codicia de los bancos, explican la situación actual. Ya lo decía el ligero de Cascos Alvárez, si la gente compra pisos caros es que los puede pagar. Mientras tanto, el Banco Santander, vendía todas sus propiedades y se quedaba de inquilino ¿Porqué será, será? Mejor beber para olvidar.

Ilustración de Christoph Niemann

lunes, 3 de mayo de 2010

EL ÁRBOL DEL OLVIDO


En mi pago hay un árbol
Que del olvido se llama
Donde van a consolarse
Vidalita
Los moribundos del alma.

Para no pensar en vos
En el árbol del olvido
Me acosté una nochecita
Vidalita
Y me quede bien dormida.

Y al despertar de aquel sueño
Pensaba en vos otra vez
Pues me olvidé de olvidarte
Vidalita
En cuantito me acosté.

Lhasa de Sela

domingo, 2 de mayo de 2010

CONFESANDO


Tarde o temprano todos acabamos confesando o confesándonos, y ese es un paso peligroso. Es como poner en manos de un extraño las llaves de la ciudadela.

El arca de las palabras
Andrés Trapiello


"La religión es un insulto a la dignidad humana. Con o sin religión siempre habrá buena gente haciendo cosas buenas y mala gente haciendo cosas malas. Pero para que la buena gente haga cosas malas hace falta la religión".

Steven Weinberg



Foto: La confesión. Saavedra (Lugo). 1980. Fotografía recogida en el libro "España Oculta"

jueves, 29 de abril de 2010

EL ARTE DEL ASESINATO POLITICO


El 26 de abril de 1998, el obispo y coordinador de la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado de Guatemala Juan Gerardi, fue asesinado a golpes en el garaje de la casa parroquial donde vivía. Sólo habían pasado dos días desde la presentación pública, en la Catedral de la ciudad de Guatemala por el propio Gerardi de un informe que documentaba minuciosamente las sistemáticas violaciones cometidas por el ejército de Guatemala contra los derechos humanos, en sus largos años de lucha contra la insurgencia. En el informe conocido como Nunca Más, se identificaban más de cincuenta mil víctimas.

Los guatemaltecos del ejército se habían hecho ricos por medio de actividades ilícitas como el narcotráfico, el secuestro, el robo de vehículos, el contrabando, la extorsiones, entre otros. El obispo Gerardi había sido asesinado porque había amenazado el dominio de los militares sobre el aparato de Inteligencia del Estado. Y no como quiso hacer creer este mismo aparato, que el crimen del Arzobispo se debía a un crimen pasional entre homosexuales. Gracias a la labor de un grupo de investigadores de la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado (ODHA) que decidieron investigar por su cuenta y, también a un grupo de fiscales y jueces, ajenos a la endémica corrupción del país, se lograron unas sentencias históricas en Guatemala.
Ya Gerardi en 1973 escribió sobre la explotación, marginación, analfabetismo, enfermedades endémicas, pobreza e incluso miseria del pueblo indigena. Y por este compromiso en 1980 cuando era obispo de la diócesis de El Quiché, la zona indígena más poblada del país, escapó a un intento de asesinato.

Los problemas de Guatemala comenzaron en el año 1954 cuando la CIA planificó un golpe de estado contra Jacobo Arbenz Guzmán, el segundo presidente electo democráticamente de Guatemala, cuando para paliar la desigualdad del sistema que él mismo calificó de “feudal”, propuso una reforma agraria consistente en expropiar las tierras ociosas que se encontraban en manos privadas y redistribuirla ente los campesinos sin bienes. Parte de esas tierras pertenecían a la United Fruit Company. El gobierno de Arbenz había reembolsado el valor a la United , pero a los desinflado precios que la compañía había declarado en el momento de su tasación para el pago de los impuestos. Medio siglo después de que Estados Unidos hubiera intervenido en Guatemala y creado un ejército moderno, y después de haber financiado fuerzas militares en El Salvador y Honduras, todas ellas eran sociedades con unas de las tasas de asesinatos más altas del mundo y en la que los poderosos e influyentes actuaban con total impunidad.

La investigación que lleva acabo Francisco Goldman en este libro se lee como una autentica novela policíaca. En febrero del 2004 el muy “liberal” y conocido escritor Mario Vargas Llosa escribió un artículo en el periódico El País-apoyándose en el libro escrito por De la Grange y Rico ¿Quién mató al obispo?-y que entre otras cosas decía “para encubrir a los verdaderos culpables, sacrificar a inocentes, y entronizar una monumental distorsión de la verdad, operación de la que un puñado de bribonzuelos, oportunistas y policastros sacaron excelente provecho personal”. Pues bien, al final lo que demostró la justica, fue que todo lo anterior y mucho más, fue cierto, sólo que todos esos bribonzuelos y policastros no eran lo que Mario Vargas Llosa y de la Grange y Rico acusaban en su artículo y libro respectivamente, sino que fueron los servicios de inteligencia de Guatemala los encargados de perpetrar un “crimen de Estado”.

Articulo publicado por Mario Vargas Llosa en El País el 22-2-2004 ¿Quién mató al obispo?

P.D. Parece ser que Vargas Llosa reconoció el error de este articulo, que estaba basado en el libro de dos periodistas de "investigación" y que trataban de exculpar a los militares condenados. Algo muy parecido a lo que ocurrió en España el 11 M, con los ácidos bóricos, y los autores intelectuales que no estaban en montañas lejanas ni en desiertos remotos.

viernes, 23 de abril de 2010

LA FLAUTA

Al tocador de flauta le depara proverbialmente el destino una suerte desdichada, y, a este respecto, se cuenta la siguiente anécdota. Tres músicos, uno flautista, tocador de trombón el otro y de bombo el tercero, decidieron irse por esos mundos con idea de ganarse el pan dando pequeños conciertos. Llegaron a la corte del zar de Bulgaria, y éste, estando aquel día de buen humor, dio orden , después del concierto, de que a los tres músicos les llenaran los instrumentos de monedas de oro. Muchas recibió el trombón, muchísimas el bombo, pero ni siquiera se pudo introducir una por la boca de la flauta. Trombón y Bombo, por compasión, dieron algunas monedas a su compañero, y de Bulgaria se encaminaron hacia Constantinopla, donde el sultán, que aquel día estaba de mal humor, antes incluso de oír el concierto dio orden de que a cada uno de los tres músicos le metieran el instrumento por el trasero. No fue posible contentar al Señor de los creyentes en el caso del trombón y el bombo, pero sí en el del pobre flautista, al que dieron por el c... con su flauta, cuan larga era, y con todas las llaves.

La flauta además de ser el más antiguo de los instrumentos de música, es el más natural, el instrumento por excelencia, porque , a través de nuestro hálito se puede decir que en la flauta lo que canta es nuestra alma.
Para obtener el sonido de la flauta es preciso soplar dentro del pequeño orifico superior practicado en el cilindro del instrumento y pronunciar el monosílabo te, de modo que las notas de una melodía para flauta son una serie de sonidos iguales te te te. Las mujeres amadas por los flautistas podrían decirnos qué sabor tienen los besos dados al son del te te te; pero no nos lo dirán nunca. Las mujeres son enemigas de la confesión, excepto cuando es con una confesora. Freud, al final de su larga experiencia de investigador del alma escribe: "No he conseguido jamás sacarle una confesión a ninguna de mis clientas".

La flauta era la vida secreta de Federico, su vida poética, el canto de su alma solitaria. Una noche el Kronprinz, de dieciséis años, fue hallado por su padre sentado sobre el alféizar de la ventana, con las piernas colgando en el vacío, todo desgreñado y absorto, tocando la flauta al claro de luna. A modo de castigo, el rey sargento le puso al cuello una argolla de cortina y, de no haber intervenido a tiempo algunos funcionarios de palacio, Federico no habría llegado a merecer el titulo de "grande" con el que le distingue la historia, porque habría muerto estrangulado muchos años antes.
Federico aprendió a tocar la flauta por sí solo, y, al principio, la tocaba mal. Luego se fue perfeccionando, bajo la égida de Quantz. el célebre flautista que le había enviado el rey de Polonia.
Éste estaba loco por la música y le gustaba rodearse de músicos, pero también de las más bellas mujeres de su reino, y, habiendo , como consecuencia de tan asiduo entorno, llegado a tener trecientos cincuenta y cuatro hijos varones, tuvo la satisfacción y el orgullo de formar toda una compañía de soldados compuesta de carne de su carne y sangre de su sangre; y era una gloria ver a aquellos espléndidos soldadotes, todos ellos parecidísimos entre sí , presentar armas a su papá con bella precisión.



El Dios Pan era también aficionado a la flauta, y la tocaba entre el mediodía y la una de la tarde. Pan, no tocaba la flauta exactamente, sino la ¡Siringa!

La flauta mágica


Nueva enciclopedia
Alberto Savinio
Acantilado

MARGARET BOURKE-WHITE





Margaret Bourke-White fué una fotógrafa y reportera única, destacó en todas las facetas y estilos fotográficos que retrató.
Era idealista, valiente e innovadora, tan innovadora como para encaramarse en las gárgolas del edificio Chrysler buscando el ángulo perfecto. Fotografió la Rusia de Stalin. Fue corresponsal de guerra, entró con las tropas americanas en los campos de concentración nazi, fotografiando a los prisioneros liberados. También estuvo en las minas de Sudáfrica, donde destacaron sus fotos sobre el racismo. También retrató la miseria de la recesión americana. Entrevistó a los líderes mundiales. En su juventud hizo el famoso retrato de Ghandi junto a la rueda india(1946).Candice Bergen interpreto a Margaret en la película Ghandi de Richard Attenborough.
En 1959 se sometió a una operación de cirugía revolucionaria para aquel tiempo, pues padecía Párkinson, ante el éxito de la primera operación decidió someterse a una segunda que la dejaría sin habla y con serias complicaciones. Murió en 1971


...El arquitecto Van Allen decoró el exterior del edificio Chrysler con motivos automovilísticos de estilo Art. decó y preparó el golpe que le pedía Chrysler, osea que el edificio quedara por encima del banco de Manhattan. Ideó un remate de acero inoxidable en forma de lanza, inspirado en la parrilla del radiador de un coche, y empezó a construirlo, en secreto, dentro del propio edificio. Llegado el momento, en noviembre de 1929, la cúpula fue alzada desde el interior e instalada a la vista de los neoyorquinos, en menos de dos horas. Un golpe maestro. El banco de Manhattan quedó burlado y empequeñecido. El golpe de efecto duró poco, solo dos años, lo que tardó otro magnate del automovilismo. Jophn Raskob, fundador de General Motors, en terminar su rascacielos. Raskob se asoció en 1920 con una familia multimillonaria, lo Dupont, y con Ellis Pearl, de la sociedad inmobiliaria Empire State, para comprar por 20 millones de dolares el viejo Wladorf- Astoria, derribarlo y ponerse a excavar los cimientos, que estuvieron listos en 13 meses y medio. El edificio tardó casi una década en alzarse. Paradójicamente, la crisis de 1929 y la consiguiente deflación, hicieron que el rascacios, al margen del solar y los cimientos, que antes de la depresión costaron 41 millones de dolares, costara sólo 24.000 dolares.

Fue un negocio ruinoso 102 pisos, 6.500 ventanas. Fue inaugurado por el presidente Herbert Hoover el 1º de Mayo de 1931 apretó un botón en la Casa Blanca y encendió todas las luces del rascacielos; el 28 de agosto de 1945 un bombardero B-25 recién terminada la guerra chocó con el piso 79, murieron 11 oficinistas y los tres tripulantes, todos carbonizados. El edificio resistió perfectamente.
Historias de Nueva York
Enric González

miércoles, 21 de abril de 2010

martes, 20 de abril de 2010

GUILLAUME APOLLINAIRE


Apollinaire nació en Roma el 26 de Agosto de 1880. Se educó con los padres maristas de Mónaco. Viajó por toda Europa. Fue empleado de agente de cambio en París. Trabajó para un editor de publicaciones libertinas. Fue acusado del robo de La Gioconda, pasó diez día en la cárcel, bebió el agua de nenúfar que le pasaban los carceleros para la aliviar el ardor de los sentidos y escribió en su celda uno de los poemas más conmovedores A la prisión de la Santé.

Antes de entrar en mi celda
preciso es que me desnude
y qué voz siniestra ulula
Guillaume en qué te has convertido.

Lázaro entrando en la tumba
en vez de salir como debiera
adiós adiós ronda cantante
oh mis años oh muchachos.

Escucho los ruidos de la ciudad
y prisionero sin horizonte
nada veo sino un cielo hostil
y los muros desnudos de mi prisión.

Huye el día ya arde
una lampara en la prisión
sólo estamos en mi celda
bella claridad querida razón.

Extranjero, tenía que ir todos los meses a la jefatura de policía a legalizar su carnet de identidad. Fue voluntario a la guerra, recibió una herida en la cabeza y estuvo entre la vida y la muerte en el hospital italiano de Auteuil, mereciéndose la legión de honor. Se llamaba a si mismo le Malaimé, pero acabó encontrando una mujer que le quiso y se casó con él, muriendo en el umbral mismo de la felicidad como Tamerlán ante el mar. Su madre, mientras pudo, ejerció la vida galante, reduciéndose finalmente a hacer de señuelo en los garitos.

El ADIÓS

Recogí esta brizna en la nieve
recuerda aquel otoño
En breve
No nos veremos más
Yo muero
olor del tiempo brizna leve
recuerda siempre que te espero.

Apollinaire murió en 1918, en París, en su pequeño apartamento, situado bajo el tejado del edificio número 208 del Boulevard Saint-Germain, como esos pajaritos que se quedan a vivir en el cuerpo del rinoceronte y cantan, se espulgan, viven su vida, mientras el paquidermo vive, por su parte, la suya. Murió de gripe española y como consecuencia de la gravísima herida de guerra que había hecho necesaria la trepanación del cráneo. Murió el mismo día del armisticio, mientras los parisinos se abandonaban al júbilo más desenfrenado. Ir contra la corriente había sido el drama de su vida. Francés por elección, Apollinaire quería de Francia lo que tiene de latina. El aspecto franco de Francia le interesaba solamente como curiosidad.

Apollinaire muere el mismo día que Rostand . Dos funerales "poéticos" recorren las calles engalanadas de banderas. Su madre La "polaca" sigue el féretro de su hijo vestida de reina de carnaval y responde a cuantos tratan de consolarla. "¿Mi hijo poeta?" Un haragán, eso es lo que era. Rostand, ¡ ése sí que era un poeta de verdad!". Ella murió el mismo año.

Las horas pasan lentamente
como el desfile de un entierro
llorarás la hora en que lloras
que huirá también rápidamente
como pasan todas las horas.

Apollinaire que escribía en prosa igual que en verso. Pero sabía que la poesía es la crema de la prosa, lo que queda de la prosa después de una larga y cuidadosa decantación, sabía que las palabras se miden con metro y los versos se atan con rimas por razones de ingestión. Sabía que el verso capta ideas e imágenes, éstas, por cierto, en mayor número que aquéllas, haciéndolas más fáciles de recordar.

P.D. Alberto Savinio; Nueva enciclopedia.

miércoles, 14 de abril de 2010

CATORCE DE ABRIL

¡Ah, que grande es el mundo a la claridad de las lamparas!
A los ojos del recuerdo ¡que pequeño es el mundo!

Charles Baudelaire




















Y en eso, un chasquido y nos devora la órbita mecánica, nos traga de repente, pasamos, como los muertos a un cuadro de papel donde sin ser nosotros seguimos siendo nosotros, donde nos convertimos en una cara sin tiempo o en una sonrisa que no le pertenece a nadie.

Antonio Lobo Antunes
Segundo Libro de crónicas


Familias sin importancia: es mucho lo que se pierde, historias enteras, no hay cabida para todos. Son sólo generaciones que avanzan como la marea, años llenos de sonido y espuma, arrastrado todo ello por lo que viene detrás. Ese es el legado de la ciudad.
Quemar los días
James Salter
Juan Pando















Juan Pando
















La suprema fortuna es saber valientemente merecer la vida, y la suprema desgracia es cobardemente no saber perderla.
Miguel Torga
Diarios















Foto: Agustí Centelles

martes, 13 de abril de 2010

ELOGIO DE LA ESTUPIDEZ


"La estupidez nunca se pasa de la raya; allá donde pone el pie, ése es su territorio" Stanislaw Lec)

El gran poeta Su Shi uno de los "ocho maestros de la prosa china" que vivió en el siglo XI. Fue varias veces encarcelado y desterrado por sus críticas al gobierno:

"Toda familia, cuando nace un niño, lo quiere inteligente. Yo, con toda mi inteligencia, he sufrido y he arruinado toda mi vida. Sólo espero que mi hijo sea estúpido e ignorante: llegará a ministro, coronando así una vida plácida".

¡Ay Sushi! ahora lo quieren futbolista, o yerno de Aznar.


Nos cuenta Chateubriand en sus Memorias de ultratumba que Napoleón cuando subió al poder, hizo falsificar el año su partida de nacimiento, pasándolo de 1768 a 1769, y no para hacerse pasar por más joven de lo que era, como podría pensar un lector superficial, sino para hacer creer que era francés de nacimiento (en 1768 Córcega todavía formaba parte de la República de Génova).

En estas memorias nos cuenta Chateaubriand que, cuando el féretro que contenía el cadáver de Napoleón volvió a Francia a bordo de la Belle-Poule y fue llevado con gran pompa a la plaza de los Inválidos, abarrotada de gente, y puesto sobre el catafalco que había sido preparado en medio de la plaza y descubierto, a fin de que todos pudieran comprobar que no había desaparecido el cadáver, éste no sólo apareció, sino que comenzó a moverse, ante lo cual la inmensa plaza quedó desierta en un instante. Añade Chateaubriand que la causa de aquellos movimientos eran los gases necróticos encerrados en la caja y liberados al levantarse la tapa.