Mientras desayuno oigo en la radio el anuncio de una alarma que detecta ladrones y robos antes de que se produzcan. El anuncio de Seguritas direct no deja claro si detecta a los cacos al nacer, cuando hacen la Primera Comunión o poco antes de dar el golpe. Ya me veo en el paro. Voy a echar el curriculum vitae a la sede del Partido de Los PePes, allí tienen buenos inhibidores de conciencia. Hay una plaza de tesorero, el anterior está de baja por depresión, perdió unos millones de euros en Suiza. El tesorero desayunaba chocolate con churros mientras su mujer se encargaba "de lo que se dice llevar una casa" y él "hacia un churro con la firma de su mujer en las declaraciones de hacienda". Su churri no es como la mía que me deja encima de la mesa unos Donuts caducados y una nota: comulga con ruedas de molino por ladrón. No todos los cabrones somos iguales, el otro, sacó de su cuenta en España 20.000 euros para los gastos corrientes de la peluquería y la leche. Yo en cambio la leche y la pelu de mi Santa las pago con fondos reservados. Como las malas noticias nunca vienen solas hoy me llega una carta de la Compañía suministradora de energía eléctrica en la que se me informa de que me van a cambiar el viejo contador por uno inteligente. Más inteligente que yo. Haber cómo me arreglo ahora para hacer el puente de Semana Santa sin que me entre la corriente. "El que roba a un ladrón tiene cien años de perdón"
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| foto curricular. |
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