jueves, 10 de diciembre de 2015

EL PUENTE DE LOS ESPIAS

Un espía ruso es detenido en Estados Unidos y para darle apariencia de formalidad, ante una sentencia ya dictada, el Departamento de Estado contrata para su defensa a un abogado peleón. Tom Hanks. En plena guerra fría defender a un ruso era un marrón, como ahora pasearse por España con un velo, llega Fernández, Ministro del Interior, y te enchirona. Todo por los votos. La gente vivía con miedo a una guerra nuclear. Un suceso va a cambiar el curso de los acontecimientos. Un piloto americano es derribado por los rusos y Tom Hanks, que ya salvó al soldado Ryan, es el encargado del intercambio de espías. Los malvados rusos no tienen nada que hacer con el abogado de los pucheros de oro que antes de mediador ya fue astronauta, naufrago y Forrest Gump. La película, dirigida y producida por Steven Spielberg, está muy bien realizada y mantiene el suspense hasta el final. Un final dulzón con mermelada y todo. Los efectos especiales son tan buenos que los de Cinesa los aprovechan para llevar la Guerra Fría a la sala.  


   

No hay comentarios:

Publicar un comentario