miércoles, 24 de septiembre de 2014

LONDRES EN TRES DÍAS (2)

Cuando un hombre está cansado de Londres, está cansado de la vida, porque en Londres hay todo lo que la vida puede ofrecerle.
Samuel Johnson

PRIMER DÍA:
El billete de metro sencillo es muy caro así que la mejor opción es comprar el abono diario. Combina metro y bus. En Barbican cogemos el circular (amarillo) y nos bajamos en Westminster. Lo primero que sorprende nada más salir de la boca del metro es La Torre de Big Ben que debe su nombre al maestro de obras el gran Sir Benjamin Hall. La torre forma parte del palacio de Westminster sede de las dos cámaras. La entrada a la Abadía de Westminster, que se encuentra a continuación, cuesta dieciséis libras. Tanto en la catedral de San Pablo como en la Abadía se pueden aprovechar los momentos de culto para entrar gratis. Siguiendo a pie por Whitehall, a la izquierda, encontramos la residencia del primer ministro en Downie Street, al final está Trafagal Square y La National Gallery. Los londinense celebrar todo tipo de acontecimientos en la plaza y también, toman las uvas de final de año en ella, se oyen muy bien las campanadas de Big Ben. Siguiendo por The Mall llegamos al palacios de Buckinghan. La avenida está flanqueada por Green Park y St James´s Park. El primero era un lugar donde, en su época, se celebran los duelos. El cambio de guardia es todos los días a las once y medía. Atravesando Heyde Park se llega al distrito de Kensington y Chelsea donde se encuentran los museos de Historia natural y de la Ciencia. Como la mayoría de los museos de Londres su entrada es gratis. Visitamos el primero, que tiene un edifico imponente. Cogiendo de nuevo el metro, visitamos Nothig Hill donde se encuentra Portobello Road con sus tiendas de antigüedades. Los Sábados hay mercado. También en metro nos trasladamos hasta Picadilly Circus. Conviene llegar al anochecer para contemplar los anuncios luminosos. En 1910 se instalaron los primeros. Bajamos callejeando hasta Wesminster y contemplamos las vistas nocturnas del Parlamento y del Big Ben. Cogemos el metro, y, final de jornada.   

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