LONDRES EN TRES DÍAS (1)

PRÓLOGO:

Salimos de Asturias en un vuelo de EasyJet a las 15 horas, y, después de hora y media, llegamos al Aeropuerto de Stansted. Una hora menos en England. Desde el Aeropuerto a Londres, estación de Liverpool, se puede ir en Autocar o en tren. La diferencia está en el precio. El tren es más caro que los autocares de Terravisión Bus. Reservando por Internet, ida y vuelta 14 Libras. El tren 31. En el Taxi de Maxi, las maletas y lo viajeros van todos juntos, llegamos al hotel EasyJet en Old Street. El hotel está a diez minutos de la catedral de San Paul y de la parada de metro de Barbican y es más básico que yo. Tiene dos camas y una percha. El baño es una cabina con todo incluido. Si para ir a la Luna los astronautas fueron en una capsula, para visitar Londres se puede partir, perfectamente, desde una cabina. Cuando llegábamos por la noche nos hubiera valido hasta la cama de un Faquir. Eso sí, el hotel estaba limpio. No tenía ni armario. Una vez dejados los trastos de matar, nos dirigimos hacia a la catedral de San Pablo y al puente del Millenium desde donde contemplamos el Támesis y Tower Bridge en un bello atardecer. Los Semáforos tienen un dispositivo para solicitar la parada pero la gente casi siempre pasa en rojo. Diez segundos para cruzar. En el suelo hay una inscripción Look Right o Look Left. Si te despistas y no sabes donde tienes la mano derecha, siempre te quedará el consuelo de morir entre las ruedas de un coche de alta gama. Cosas de la Tasa.