martes, 11 de septiembre de 2012

DUQUE DE OSUNA

Mariano Téllez Girón y Beaufort (1814-1882) fue un noble, político y diplomático español  que llevó una vida de lujo y despilfarro. Eusebio Blanco que lo conoció ya sesentón en casa del marques de Vinet, le describe de la siguiente manera: "rechoncho y pálido como un cirio, iba lleno de placas, bandas, estrellas y rosetas de todas las ordenes del mundo. Se le admiraba como si a todos nos hubieran dicho: ese que viene por ahí toma desayuno con diamantes y en lugar de pastillas para la tos traga monedas de cinco duros".
En su juventud había sido bizarro militar. Luego, como embajador, fue siempre extraordinario, no tanto por su cargo como porque gastó su inmensa fortuna en proporcionar inusitado esplendor a sus representaciones diplomáticas. Siendo embajador en Rusia tenía absorto a los opulentos moscovitas. Los riquísimos grandes duques, asombrados, se persignaban según el rito griego al contemplar los derroches de aquel don Mariano Téllez  Girón y Beaufort, duodécimo duque de Osuna, que no paró en grandiosos delirios hasta darle enviada al mismísimo Zar.
En efecto, un día mandó poner a todos sus caballos, que eran más de un ciento, herraduras de plata. Y una noche apareció en un baile de Corte tan cuajado de brillantes, que el fulgor de esas piedras preciosas  duplicaba en el salón las luces de las arañas, lámparas y candelabros. Terminó arruinado.

Antonio Espina
Las tertulias de Madrid
Simplemente Mariano 

3 comentarios:

  1. Pero...¿de donde y vinieron les perres?

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    1. Se decía que podía cruzar España de norte a Sur pisando terreno propio. Con tanta tierra sería patateru.

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