Para el amor no existen barreras, más bien no existían, ya que Slavica le acaba de pedir el divorcio a Bernie Ecclestone, la fortuna 24 del mundo.
No me digáis que la foto no ye enternecedora, y como Sla -para los amigos- coge por el hombro a Berni- para los amigos también- y le susurra al oído, anda papito, cómprame un lavavajillas.
... Algunos medios apuntan como espoleta la tacañería del empresario, de quien se a dicho que forzaba a su mujer a lavar los platos al negarse a comprarle un lavavajillas. (El fin de una pareja...)
Berni comprale el lavavajillas que te vas a quedar sin la mitad de tu fortuna- 2500 millones de euros- y ahora la vida está muy achuchada. Además tu mujer no estaba contigo por dinero, estaba por amor, si por amor a la Formula 1.
Y como te van a dar un buen palo, en solidaridad ahí va una canción de de Jarabe de PALO.
El dinero ya se sabe... Lo dice la Biblia o Dios o el Dinero. De todas formas le recomendaría un librito: http://www.noticias.com/reportaje/marketing-pareja-30h.html
ResponderEliminarse llama Marketing de parejas. Lo que no arregle un libro...!!! aunque sea en la cocorota.
(miner ya tienes mi e-mail, por lo que podías darme directrices para mejorar mi blog, gracias.)
se les rompió el amor.....menos mal que las penas con pan son menos penas.....viendo esa foto no se puede negar que el amor ( de Slavica)es ciego....
ResponderEliminarSlavica, si quieres te compro yo el lavavajillas. Y si se marcha la electricidad, te friego yo los platos.
ResponderEliminarMiner, me da que sin las gafas no tienes nada que haces con Slavica. Fueron las gafas las que la sedujeron.Apuesto.
ResponderEliminarOye Karen ahora que lo dices, tienes razón, les gafes son más grandes que él. Claro que pa ver a esi cachu hembra necesitara gafes panoramicas.
ResponderEliminarYo conozco una pareja (y tú al varón) que se separó por la compra de un ventilador.
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