domingo, 18 de enero de 2009

CHESIL BEACH


Esta novela de Ian Mcewan ha sido votada por diferentes escritores y críticos españoles como la mejor del año 2008, sin embargo en Inglaterra no tuvo tan buena acogida.
Pues bien, como decía Sandor Maraí en sus diarios, los tomos de las enciclopedias son ladrillos que tanto pueden servir para levantar presidios como catedrales. Ya que no es difícil saber, pero crear algo nuevo a partir de los datos sigue siendo tan arduo hoy como lo ha sido siempre.
Aplicando esta máxima de Sandor, a la novela de Ian, se puede decir eso de que con cuatro ladrillos, levanta, no digo que una catedral, pero si una basílica.
Porque vamos a ver, si de la noche de boda de una pareja joven e inexperta, consigue construir una novela, se puede decir que ha hecho una buena utilización de los ladrillos. Tan inexperta era ella, que incluso acude a la noche de bodas con un manual- algo así como Escuela del amor y el matrimonio, este era un libro que tenía mi madre en casa, y que lo utilizaba de adorno, pues no sabía muy bien de que iba, pero ahí estaba yo, que ya me picaba el niki y lo utilicé para desentrañar los secretos del sexo, total para lo que me sirvió, para lo mismo que a la protagonista, para nada-.
No voy a recurrir a lo fácil de decir, que de esos polvos salieron estos lodos. Pero el narrador si, y entonces analiza los lodos. El, Eward, pertenece a una familia que hoy se diría desestructurada, coño que palabreja, y ella, Florence, a una familia de clase alta. Se conocen en una manifestación pacifista, en los años sesenta, y todo para terminar en la cruda realidad, osea en el polvo, casi podemos decir que esta ye una novela circular, pero se cerrara el circulo. Que pasará al final (...).
El que lo quiera saber, sólo tiene dos soluciones, o comprar el libro o llamarme por teléfono, además yo por teléfono gano mucho, más bien pierdo, años. El teléfono no lo pongo aquí, porque ya lo conocéis todos, total este blog sólo lo lee la familia. La verdad esto no es serio . Seguro que no me dan el ondas, ondas, ondas... pero bueno para lo que me pagan. Si queréis una crónica seria sobre la novela, pinchar aquí abajo. La critica ye de uno que sabe Eduardo Mendoza Chesil Beach



2 comentarios:

  1. ¡ala!, ya me picó la curiosidá. Otra pa anotar

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  2. Ésta no la leí. Pero "Expiación", del mismo autor(Ian Mcewan), es uno de los libros que leí con más gusto e interés. El tal Mcewan es, en mi opinión, un soberbio narrador.Nunca había leído hasta entonces nada suyo, pero creo que me acabas de proporcionar con tu comentario la posibilidad de volver a él.Gracias.

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